Internet es ese monstruo camaleónico que se adapta absolutamente a todo. Un paisaje capaz de albergar a todas las especies y a todas las condiciones como el propio mundo. Nada se escapa de la influencia de internet, ni lo más moderno ni lo más tradicional, la Navidad no iba a ser menos.
La Navidad está en internet y podemos encontrarla en estos días en todas sus facetas. La más notoria es posiblemente la de las felicitaciones que, como otros mensajes de tradición postal ordinarios, se hacen fuertes y ya prevalecen sobre aquéllos en muchos casos. Todos recibimos en estos días multitud de felicitaciones comerciales, de familiares y amigos o de nuestro entorno laboral a través de correos electrónicos, redes sociales y sitios web mientras navegamos por la red. Las posibilidades técnicas que nos ofrece el medio, hacen que la creatividad y la originalidad se multipliquen cada año y hayamos pasado de la felicitación en html, a sofisticadas animaciones, montajes y videos.
Si hay algo navideño de verdad son los regalos, Papá Noel y Los Reyes Magos. Ellos también utilizan internet más que nunca, las estadísticas de las compras online crecen y crecen hasta superar todos los records en estas fechas. Pocos son ya los que se resisten y muchos los que han perdido el miedo a comprar por internet; algo fácil, muy cómodo y en muchas ocasiones bastante más barato que hacerlo en comercios tradicionales.
También las costumbres más arraigadas en España por estas fechas tienen su espacio en la red: la lotería de Navidad es un ejemplo de tradición que ha encontrado en internet la herramienta perfecta para evolucionar. Así, mientras muchos siguen haciendo colas interminables en administraciones de reputada fortuna, otros buscan su número fetiche por toda España a la vez a golpe de ratón a través de la red, los mismos que el día del sorteo comprobarán a las pocas horas si sus números tienen premio sin tener que esperar al día siguiente para perderse entre los diminutos números de las listas publicadas en la “sábana” del periódico.
Así es internet, todo lo sabe y todo lo puede. ¿Todo? No. Hay algo que aún nos queda lejos de la tecnología y así debe ser, esas cosas que van de la mano del sentimiento más cercano y que perduran pese a la evolución y la revolución: los encuentros, las celebraciones familiares, los amigos, la ilusión de los más pequeños, la bienvenida a un año nuevo y los besos y abrazos de los nuestros, que nos traen la felicidad, para la que aún no se ha inventado nada mejor.
FELIZ NAVIDAD.
